Proceso para sustituir una batería AGM

Cada día más, acuden al taller vehículos que incorporan sistemas para la gestión de la energía tales como: start-stop, gestión inteligente del alternador, etc. La batería es el corazón de estos sistemas y también ha sufrido una gran evolución en los últimos años.

En posts anteriores, profundizamos en la técnica de las baterías AGM (consultar: Batería AGM Absorbent Glass Mat, características y funcionamiento). En cambio, hoy nos centramos en la parte más práctica. Es decir, analizaremos un proceso tan cotidiano como es la sustitución de una batería, pero en este caso, de una AGM. 

¿Cómo distinguir si una batería es o no una AGM?

Como norma general hay tres “pistas” que nos ayudarán a identificar una batería AGM:

- La batería AGM tiene más potencia en arranque que una batería convencional.

Si se fija en las imágenes, verá que ambas baterías tienen una capacidad de 80 Ah y una potencia de 800 A (potencia de arranque o de descarga), es una cifra alta, una batería convencional de 80 Amperios/hora suele rondar los 600-700 Amperios.

Además, también apreciará que la batería negra (General Motors) tiene el marcaje “AGM” mientras que la roja (Renault), que también es del tipo AGM, no lo indica con ningún marcaje. No siempre se dispone de siglas para su fácil identificación.

- Una batería AGM nunca tendrá el visor de desgaste denominado “ojo mágico”.

Batería AGM, no tiene visor (los tapones no son desmontables, una AGM no tiene mantenimiento).

Que no le despiste su elevada potencia, tiene visor, no es una AGM.

Como se comentó en el post anterior, en las AGM el ácido se empapa en unas placas de fibra de vidrio. Por este motivo no es posible incorporar el “ojo mágico” (que no deja de ser un densímetro o boya).

Generalmente las baterías AGM suelen disponer de un “sensor inteligente de batería” “borne inteligente”. Este dispositivo realiza la función de amperímetro y controla la carga o a descarga de la batería.

Hay que aclarar que este dispositivo forma parte de la estructura eléctrica del vehículo y no de la batería, es decir, lo incorporan los vehículos con alternador pilotado, sistema start-stop, etc.

Nos podemos encontrar con una batería convencional con “borne inteligente” (por ejemplo porqué se equipa un alternador pilotado) pero como las AGM siempre acompañan sistemas de última generación es poco común ver una AGM sin “borne inteligente”.

También es cierto que si el vehículo dispone de start-stop, es habitual que incorpore una AGM.

Instalar la nueva batería.

Este proceso no difiere del que aplicaríamos en una batería convencional, lo único a tener en cuenta es la desconexión del “borne inteligente”.

El “borne inteligente” siempre se encuentra en el borne negativo de la batería (en la instalación), y como norma general, para su correcta desconexión debemos respetar un orden:

1 - Desconectar borne negativo.

2 – Desconectar conector “borne inteligente”.

Para su conexión proseguimos con el orden inverso:

3 – Conectar conector “borne inteligente”.

4 – Conectar borne negativo.

Si se desconecta el conector del “borne inteligente” manteniendo la batería conectada, es posible que la unidad de control que gestiona la energía reconozca fallo de este, en consecuencia, se inhabilitan temporalmente las funciones del sistema start-stop.

Configurar con el útil de diagnosis el cambio de batería.

La unidad de control de gestión de energía del vehículo mantiene un registro de los valores y parámetros que ha generado la batería durante toda su vida útil. Estos valores se pueden ver con el dispositivo de diagnosis.

Como puede observar en la captura de parámetros de la unidad, se registran todos los datos y se tienen en consideración a la hora de efectuar su gestión (se estima un cálculo de desgaste dela batería). 

Se entiende así, que si sustituimos la batería y no se lo constatamos a la unidad (mediante útil de diagnosis) ésta no reconocerá el cambio pudiendo llevar a error el sistema de gestión.

Existen dos opciones a la hora de instalar la nueva batería:

- Montar una batería del mismo tipo y capacidad que la antigua.

- Montar una batería de distinto tipo o capacidad que la antigua.

Según escojamos una opción u otra deberemos seguir procesos de configuración diferentes dependiendo del caso.

Capacidad diferente:

Con esta opción es posible cambiar las prestaciones de la batería que tiene memorizadas la unidad de control y adecuarlas a las características de la batería que hemos montado (es la opción que debemos elegir si montamos una batería diferente).

Se muestra la batería registrada en la unidad.

Es posible cambiar el tipo de batería: AGM / NO AGM.

Es posible cambiar la capacidad de la batería: 90 Ah / 80 Ah.

Misma capacidad:

Si se opta por la opción de montar una batería de prestaciones iguales a la vieja,  los contadores de desgaste se ponen a cero y se mantiene la configuración del tipo de batería (es la opción a elegir si montamos una batería igual a la que había).

Finalmente arrancamos el motor y comprobamos que no se enciende ningún testigo del sistema de carga. Podemos advertir al usuario del vehículo que puede que el sistema de parada y arranque (start-stop) no le funcione temporalmente, algunas unidades requieren de unas horas de adaptación (ciclos de funcionamiento) después del cambio de batería para restablecer el sistema.

No todos los fabricantes de automóviles utilizan este método para sustituir la batería, en algunos de ellos, el proceso difiere al aquí indicado pero en su mayoría el método pasa por configurar el cambio con un equipo de diagnosis (consulte a su servicio de asistencia técnica el proceso específico para el vehículo en cuestión). 

Si no se respetan los procesos de cambio de batería que indica el fabricante del vehículo, es muy posible que el sistema de gestión de energía encienda el testigo de carga y registre fallo en el sistema.

Testigo de avería